La veteranía es un grado y Goierri sacó provecho. Dominador del ritmo de partido , el M. Unibertsitatea no pudo mantener la constancia y la fe en el trabajo. Acusamos en demasía nuestra bisoñez.

Lehenengo Maila (10/10/2009).- De Miguel salió a romper el partido y lideró la anotación de los locales (20 puntos en el primer cuarto) A pesar de conocer los argumentos ofensivos de Goierri, no pudimos (más bien no supimos) neutralizarlos. Los jugadores no tenían fe en el trabajo defensivo y permitieron todo tipo de alegrías a los de Urretxu. Las segundas y terceras opciones dispuestas por los locales cayeron como losas en la moral de nuestros jugadores que se mostraban incapaces de reaccionar. En ataque un Aranzabal soberbio (12 puntos – 3 recuperaciones) mantenía el tipo y ponía nervioso a De Miguel que se veía desbordado por el del Ointxe. El 29-24 de parcial en el primer cuarto deja claro que las virtudes defensivas brillaron por su ausencia.

El segundo cuarto se nos apagó el motor. En ataque éramos incapaces de acercarnos al aro y en defensa Goierri no machacó con un 17-2 en los 8 primeros minutos. Sin ideas, poca vocación defensiva y terriblemente desacertados en la toma de decisiones, el panorama pintaba bastante oscuro para el M. Unibertsitatea. Un tiempo muerto a la desesperada para frenar la debacle de los visitantes dio sus frutos. Los universitarios se tranquilizaron en el campo y consiguieron un 4-11 de parcial que nos llevaba al vestuario con posibilidades de pelear por el partido. 21-13 de parcial y 50-33 al descanso.

El M. Unibertsitatea cargó pilas en el vestuario y comenzó a marcarle el paso a los locales. Xabier Anasagasti dio un recital de intensidad y de trabajo acojonante. Omnipresente en el rebote y con gran facilidad para anotar se erigió el protagonista del cuarto. Goierri se contagió del ritmo del Ointxe y jugó a cambiar canastas descuidando su trabajo defensivo. Con un gran espíritu de trabajo conseguimos ir rebajando la desventaja punto a punto, pero Lecuona tomaba el relevo en ataque y sus acciones propiciaron la victoria local por 23-22 en el tercer cuarto. Los morados habían conseguido su sitio en el campo.

En el último cuarto el Ointxe buscó la “heroica”. Arriesgó en defensa y buscó la debilidad física de Goierri. Pero esa debilidad no se produjo y retomó el “timing” del partido. El espíritu del M. Unibertsitatea flaqueó y fue consciente de que la victoria era imposible de conseguir. Ahora se trataba de sumar cosas positivas. Zabalo salía al campo a vivir la experiencia de defender a Lecuona. El resto del equipo aguantaba el tipo y durante los últimos tres minutos dio una lección de pundonor. Lo pelearon hasta el final mientras Goierri disfrutaba de una merecida victoria. 22-18 de parcial.

Cura de humildad. Sin trabajo diario no puede haber recompensa. A pesar de todo, MUCHAS COSAS BUENAS.

Hoy hemos madurado un poco más.

GOIERRI 95 – M. UNIBERTSITATEA 77

PARCIALES: 29-24 / 21-13 (50-37 Descanso) / 23-22 / 22-18 (95-77 Final)

GOIERRI: De Miguel (32), Lecuona (21), Aiesta (5), Goikoetxea (5) y Mitogo (20) –Quinteto Inicial- Barquero (4), Gómez (7), Antzizar (1),

M. UNIBERTSITATEA: Aranzabal (23), Anasagasti M (9), Anasagasti X (23), Moracho (6) y Bidaburu (6) –Quinteto Inicial- Barbero (7), Isasa (3), González, Rodríguez y Zabalo