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Valentín Berriotxoa, Paco de Miguel y Antón Rodríguez llevan media vida trabajando por el baloncesto en Urretxu. Mañana se les tributará un homenaje en el que participarán los veteranos del Real Madrid

Los aficionados al baloncesto de Urretxu y Zumarraga tienen una cita ineludible mañana a las 18.00 horas en el polideportivo Aldiri. El Goierri se mide a los veteranos del Real Madrid en un partido organizado para homenajear a tres de los vecinos que más han hecho para promover el deporte de la canasta en estas dos localidades: Antón Rodríguez, Valentín Berriotxoa y Paco de Miguel.

Estos tres urretxuarras lo han sido todo en el baloncesto local. En los años 60 fueron testigos de la llegada de este deporte a la comarca, se engancharon a él y desde entonces no lo han dejado. Rodríguez y De Miguel empezaron como jugadores y Berriotxoa se inició como delegado. Después fueron entrenadores y en la actualidad siguen vinculados al club.

Los tres protagonistas recuerdan que el primer equipo federado lo sacó el colegio La Salle-Legazpi a mediados de los años 60. Después José Luis Esnal creó la sección de baloncesto de la sociedad deportiva Goierri y los vecinos de Urretxu y Zumarraga se volcaron con el deporte de la canasta. "Hay que tener en cuenta que por aquel entonces todavía no había equipo de fútbol federado", comentan.

Los primeros partidos se disputaron en la plaza Gernikako Arbola de Urretxu, pero pronto pasaron al frontón Ederrena. "La normativa decía que los días de lluvia había que jugar a cubierto y aprovechamos eso para entrar en el frontón. Una vez dentro, nadie consiguió sacarnos. Éramos la envidia de los equipos de la capital, pues ellos no podían disputar todos los encuentros a cubierto", recuerda Berriotxoa.

ilustres en el ederrena

Iturriaga y Santos

Los partidos se disputaban los domingos a las 12.00 horas y eran todo un acontecimiento social. De Miguel recuerda que en cierta ocasión recaudaron 8.000 pesetas. Hay que tener en cuenta que la entrada costaba sólo 25 pesetas y los niños entraban gratis. "Por aquel entonces Miguel Santos entrenaba al Juven y le encantaba venir a Urretxu y disfrutar del ambiente del frontón Ederrena".

Los aficionados de Urretxu y Zumarraga incluso acudían a los partidos que el equipo jugaba como visitante. "Nosotros íbamos en un autobús y ellos en otro. Estábamos en Tercera División y nos desplazábamos a Asturias, Burgos, Cantabria, La Rioja… Las carreteras eran muy malas y a veces teníamos que ir de víspera", señalan.

El delegado Mario Pisani , en cambio, hacía el viaje de ida y vuelta el mismo día en el que se iba a disputar el partido para poder cumplir con sus compromisos como cantante en el casino. "A la vuelta cantaba en los pueblos y pasaba la txapela", comentan. Durante estos viajes vivieron muchas anécdotas. "En Burgos nos tocó una canasta que estaba torcida, pero en el descanso la calzaron para que el equipo local pudiera jugar como Dios manda", recuerdan entre risas.

Bromas aparte, el Goierri siempre ha sido un equipo muy competitivo y en aquella época su estrella era el legazpiarra Joxe Murua. Los tres coinciden en que ha sido el mejor jugador que ha pasado por el club. Jugó en la máxima división estatal: primero en el Kas de Bilbao y después en el Baskonia. "Cuando estaba en la mili leí en un periódico que Murua, todavía en edad juvenil, dejó en seis puntos a Brabender", comenta De Miguel.

El legazpiarra salió del Goierri con 16 años y los tres protagonistas de este reportaje iban primero a Bilbao y luego a Vitoria a ver sus partidos. "Jugaba con el actual presidente del Baskonia, Josean Kerejeta. Éste todavía no tenía coche y una vez tuvimos que traerle a Lazkao: hasta Urretxu en un Simca y de aquí a su pueblo en un 600", recuerda Berriotxoa.

También tuvieron relación con uno de los jugadores que quizá tome parte en el homenaje de mañana: Juanma López Iturriaga. "En su última temporada en el Loiola-Indautxu, justo antes de fichar por el Real Madrid, jugó en el frontón Ederrena", señalan. Si vuelve a Urretxu, se lo recordarán.

Los tres protagonistas están "orgullosos" de que el club por el que han trabajado durante más de media vida haya organizado semejante homenaje. "Ha sido una gran sorpresa y estamos muy contentos. Queremos dar las gracias a los que han trabajado en los preparativos del acto", concluyen.